No hay deuda que no se pague, ni plazo que no se cumpla, llegaron las vacunas a Colombia, lo que muchos esperaban empezó a ocurrir en el territorio nacional, noticia de trascendencia y relevancia que desde los medios de comunicación tiene un cubrimiento que pasó de la noticia al espectáculo. Llegada del avión en el minuto a minuto, seguimiento de un vehículo en la calle 26 hasta la Zona Franca, custodia en su almacenaje y posterior traslado a las regiones, un show que resta importancia a lo coyuntural, la objetividad, lo que debe estar en el ejercicio profesional de la industria de la comunicación; priman intereses políticos y económicos sobre el interés general, aquellos hechos que se debe comunicar y a los que se debe hacer seguimiento para un cubrimiento objetivo y óptimo en cada una de las esferas de la noticia. Tratamiento que lleva a preguntar qué está pasando al interior de la empresa periodística y cómo se está funcionando en un nuevo entorno post–pandemia, es lo que afirma el periodista, investigador y coaching, Andrés Barrios Rubio, en la columna de Pulzo.com que ha titulado «Llegada de las vacunas contra COVID-19: ¿noticia o espectáculo?» y amplía en el podcast «Panorama Digital».
Para el PhD. Barrios Rubio, el cubrimiento periodístico que se brindó a la llegada de las vacunas acabó de asestar profunda herida al concepto de la noticiabilidad ya maltrecho por la rutina mediática. Primeras vacunas que arribaron a Colombia fueron estandarte para que los cánones del periodismo, que se enseñan en las aulas universitarias, tristemente recogieran ejemplos visuales, sonoros, textuales e iconográficos de como se difuminaron los principios que definen la concepción informativa: objetividad, veracidad, imparcialidad y claridad. Show de la industria de la comunicación rompió los criterios de la noticiabilidad, parámetros que permiten valorar si un acontecimiento puede o no convertirse en un hecho de trascendencia.
Si bien es inobjetable la importancia del episodio, y ameritaba contar lo que se viene, no es menos cierto que faltó cubrir con mesura y equilibrio, sin ridiculizar e inflar, el hito histórico que significa para el país recibir el insumo mínimo de dosis para iniciar un plan de vacunación, tardío, que debe ser ininterrumpido si se quiere cumplir con el objetivo de masificación. Narración de la aproximación y aterrizaje del avión, caravana por la 26 –del Aeropuerto El Dorado a la Zona Franca–, custodia permanente a las afueras de la bodega, minuto a minuto del traslado a las regiones, entre otros, sumado al lenguaje utilizado, rayan el límite de la objetividad para la construcción de realidad en el imaginario colectivo.